En la tercera entrega, aprendimos a separar por su tipo nuestras deudas, y comenzamos a analizar si lo pagamos todo o no.
En el caso de nuestro amigo, podemos observar que no cuenta con suficiente dinero para liquidar todo, y si lo liquida por partes no sabe si el dinero que le sobra le alcanza para terminar la quincena.
Para esto, es necesario empezar a hacer un presupuesto. Así como en cualquier empresa, tu también debes hacer un presupuesto. Es difícil empezar de cero y mas si previamente no contamos con ningún tipo de información histórica. Pero aquí te ayudaremos.
Lo primero es hacer una lista de los gastos de cada semana. Por ejemplo:
- Pasajes : $ 12.00 diarios al trabajo/casa x 5 días = $ 60.00
- Comida: $ 35:00 diarios x 5 días = $ 175.00
aquí podemos observar que necesita $ 235.00 cada semana para ir y volver al trabajo y comer.
Si le paga al compadre los $ 500.00, se queda corto para el gasto de 2 semanas. pero quizás le alcanza para sobrevivir el resto de la quincena. Si paga la televisión, se queda muy corto y seguramente no le alcanza para todo lo demás. Aquí es cuando nuestro amigo se empieza a desespera y no sabe que hacer. y lo mas fácil es postergar la deuda o el error que muchos cometen es pedir prestado mas. Recordemos que no sabemos con exactitud si el saldo que le quedaría después de pagar cualquiera de las deudas le es suficiente porque no tiene un presupuesto y no tiene idea de cuanto tiene que pagar.

Llega el día 22 y nuestro amigo tiene que pagar la casa el día 24, que es de $ 3,000.00 y ya vemos que no le alcanza, ahora tenemos 3 opciones:

Nuestro amigo decide pagar la casa, y quedarse con $ 27.70 hasta el día 31 que le pagan su quincena.
Lamentablemente la gran mayoría de la gente se encuentra en esta situación todo el tiempo y entra en un circulo vicioso.
Para poner en orden tus finanzas personales necesitas hacer un presupuesto anual.
Hasta este punto, hemos aprendido a diferenciar el tipo de deuda, a saber cuanto dinero tenemos disponible y a conocer el gasto hormiga (no se olviden de este gasto que en el futuro veremos su importancia)
Quizás estas diciendo: es muy complicado, no tengo tiempo de hacerlo, y así hay mil pretextos. Para sanar tus finanzas se necesita tiempo, dedicación y compromiso con uno mismo.
En la siguiente entrega, aprendernos a hacer nuestro presupuesto.